lunes, abril 26, 2010

Desvaríos de un trastornado (4)

Sobre el escritorio un montón de papeles de apuntes que descubren el largo curso de bachiller que ha transcurrido. Meros recuerdos que en el futuro serán la prueba de que yo estudié el bachiller. Últimamente es lo único que hago recordar. Que si quien fue el presidente de la república, que si el año pasado hice aquello, que si tal, que si pascual. Lo de siempre, ya sabéis. No se por qué, quizá sea el pesimismo que últimamente me envuelve, pero no soy capaz de encontrar en esos recuerdos nada que ratifique que todo tiempo pasado fue mucho mejor. A veces, cuando no se disfruta del presente, no se puede recordar con buenos ojos lo que en otros tiempos te sucedió. A lo mejor es por eso que el todo me parece nada y la nada el todo para salir de esta realidad que no quieres afrontar, pero que debes hacerlo. Pero ¿Cómo? Hay algunos que se agarran a clavos ardiendo que no hacen sino agravar la situación. Otros, los que pueden, tratan de superarlo con la ayuda del resto. Algunos, los que tienen más suerte, lo consiguen. Los que no lo consiguen pasan el resto de su. entrecomilllas, mala racha viviendo en una profunda soledad, sabiendo que están rodeados de gente y sintiendose solos. Solamente les quedará buscar a alguien o algo que les haga salir de ese estado de aislamiento. Así me encuentro yo ahora mismo, buscando algo. El alguien lo tengo pero el vacío existencial sigue ahí.

sábado, abril 10, 2010

Tú eres la clave...

Era bien temprano para levantarse un sábado. Su madre se había ido a trabajar. Por lo que estaba sola y seguramente una nota estaría encima de la mesa esperándola. Cogió leche, cereales, un bol…y se lo llevo a la mesa. Y como no, la nota estaba allí. Le echó un vistazo rápido a sus tareas: recoger el cuarto, lavar los 4 platos de la cena…y la más importante comprar el pan. Para ella esa era la primordial. En la panadería le esperaba el chico que a ella le gustaba…había hablado tanto de él con su madre…Dejó el desayuno sobre la mesa, corrió a coger el portátil para poner música, la música que a ella le gustaba, para ambientar la casa mientras se preparaba…Una ducha…una sesión de plancha, maquillaje, el conjunto mas nuevo…aunque algo incomodo para ir solo a la panadería….los tacones… estaba echa un pincel. Bajó corriendo los 4 escalones del portal y salió a la calle. Pero al poco tiempo empezó a tronar. Vaya, el pelo. Con el rato que le había dedicado ahora se le iba a estropear con la lluvia. Salió corriendo a ver si llegaba a la panadería. Al fin llegó y una música familiar le hizo flotar en el aire. Era su música, la que a ella le gustaba. Pero tuvo la mala suerte de que en ese momento una de sus amigas le llamasen al móvil y el tono de llamada sonó más fuerte que la música que tenía hace nada de fondo, era muy desagradable, y a pesar de tenerla de tono, no le gustaba. Dirigió la mirada tras el mostrador y vio que su chico la miraba extrañado con el ceño fruncido, vaya-pensó- le he molestado… se dio media vuelta y salió a la calle. Pero por desgracia, empezó a llover. El pelo se le mojó, el maquillaje se estropeó, se empapo enterita y no iba nada cómoda andando con esos tacones…Llegó a casa destrozada. Se desplomó sobre la silla donde se había sentado para desayunar y vio algo…en la nota…había algo que no había leído con las prisas…cogió la nota y leyó lo ultimo que había dejado escrito su madre : …ah! Y no te olvides: SÉ TU MISMA! :) ...sonrió para sí y todo se volvió para ella diferente. Esa era la clave…ser ella…Se levantó rápidamente y se acordó de que el pan no lo había comprado. Estaba a tiempo. Entró en su cuarto y se vistió con unos vaqueros y una camiseta del año pasado. Desde aquel día nunca lo olvidaría…la clave es ser tú mismo…porque solo tú puedes ser perfecto a tu manera